¿AMO DE MI DESTINO?… ¡¡ CAPITAN DE MI ALMA !!

En la noche que me envuelve
negra como un pozo insondable
doy gracias al Dios que fuere
por mi alma inconquistable.
En las garras de las circunstancias
no he gemido ni llorado.
Ante las puñaladas del azar
si bien he sangrado, jamás me he postrado.
Más allá de este lugar de ira y llantos
acecha la oscuridad con su horror.
No obstante la amenaza de los años
me halla y me hallará sin temor.
Ya no importa cuan recto haya sido el camino
ni cuántos castigos lleve a la espalda.
Soy el amo de mi destino.
Soy el capitán de mi alma.

No son fechas de mi agrado las Navidades, solo sirven para pasar lista y echar de menos a las personas que nos faltan, vives una “alegría” más por los que si están que por tus propias apetencias, siempre tratas de distraerte a través de la compra de regalos, la preparación de las comidas, las felicitaciones el desearnos mejores y buenos deseos ¿la antesala de la felicidad? que diria E. Punset, pero al menor descuido te llega “el nudo” y aparece en tu lista otro ausente al que recuerdas, felizmente, en su faceta buena ¿es esto el espíritu de la navidad? ¡¡ menos mal !! creí que lo había perdido… pufff
Bueno, ya hemos expulsado la anti-felicidad y si que es bueno y necesario recordar, extrañar a los ausentes, son parte de nuestras vidas ¡ a Dios, gracias!, pero traigo el poema de William Ernest Henley recuerdo de la película INVICTUS – Nelson Mandela, y ante la duda de si somos o no “el amo de mi destino” por la serie de circunstancias y responsabilidades que nos rodean, la “mochila” con la que cargamos como caminantes, dudo algo de poder ser el AMO, pero en lo que todos mis “maestros” coinciden es que si que soy el amo de la actitud / armas con las que me enfrento a mi destino, el destino, hay muestras de ello y muy recientes, existe y nos dirigimos a él, queramos o no… el camino lo vamos a recorrer y toca hacerlo con mucha o menos “mochila” pero eso lo elijo YO, y ¡ no dudes ! iré más o menos cargado en función de como quiera hacer cada etapa, si la etapa está marcada en rojo, o sea, si quiero ganar esa etapa, procuraré ir ligero, para concentrar el esfuerzo en ella… para otras etapas, poco importará la carga, serán etapas de recuperación…

pero de lo que tampoco debes dudar es que “Soy el capitán de mi alma.” y eso, querido amig@, es territorio “comanche”… ¿te imaginas que el pensamiento fuese transparente? .. ¡sería terrible!, ver que alguien que te pone buena cara, piensa lo contrario… ¡ terrible, terrible..!, claro que recuerda aquello de que “la cara es espejo del alma”, y algunos no somos muy disimulados y tenemos el lenguaje corporal muy conectado a lo emocional, o sea, que no somos muy disimulados: ¡ miradas que matan !
… pues eso, que nos puede condicionar el destino, por aquello de la mochila, pero … el alma es nuestro único patrimonio ¡¡ no la vendas al diablo, ni a la “mochila” !! ¿y por qué no?

AUTOMENSAJE:

¡¡ echa el alma en las etapas marcadas en rojo !! no te gastes en batallas perdidas, ahorra esa energía para nuevas etapas que quieras y necesites ganar… caminante, no hay camino… se hace camino al andar..

Deja un comentario